Planificación del parto después de una cesárea o de una cirugía uterina
Si ha tenido un parto por cesárea o una cirugía uterina previos, y está nuevamente embarazada, es importante que hable sobre su plan de parto con su profesional de atención obstétrica. La cirugía previa que involucró el útero aumenta el riesgo de una complicación seria llamada "ruptura uterina" durante el trabajo de parto. Aunque a menudo es seguro considerar un parto vaginal, se recomienda una cesárea programada como la opción más segura si ha tenido:
más de 2 partos por cesárea previos,
un parto por cesárea previo con una incisión uterina clásica (arriba y abajo), en T o en J,
ciertos tipos de cirugía uterina para extirpar fibromas o por otras razones, o
una ruptura uterina previa.
Su equipo de atención médica necesitará conocer detalles sobre estas cirugías uterinas previas para recomendar las opciones más seguras para el parto de su bebé. La siguiente información puede ayudarla a comprender por qué esta información es importante y cómo analizar sus opciones de parto con su profesional de atención médica.
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Su profesional de atención obstétrica necesita saber la siguiente información:
La cantidad de partos por cesárea que ha tenido
Si ha tenido algún otro tipo de cirugía en el útero (por ejemplo, para extirpar un fibroma)
El tipo de incisiones que se realizaron en el útero durante sus partos por cesárea o cirugías uterinas
Cualquier complicación que haya ocurrido durante cualquiera de estas cirugías
Esta información debe estar disponible en su historia clínica, a la que su profesional de atención médica puede ayudarle a acceder.
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Un parto por cesárea implica dos incisiones: una incisión en la piel del abdomen y otra incisión en el útero. La incisión en el útero puede ser horizontal (llamada "incisión transversal"), vertical (llamada "incisión clásica") o una combinación de las dos.
En la mayoría de los partos por cesárea, se realiza una incisión transversal en la parte inferior del útero para extraer al bebé. El tejido muscular en la parte inferior del útero es más delgado que en la parte media del útero, lo que hace que la cirugía sea más fácil y produce menos sangrado.
En una pequeña cantidad de partos por cesárea, se realiza una incisión clásica en la parte media del útero. Este tipo de incisión se puede realizar cuando no es posible o seguro realizar una incisión horizontal. Las razones para realizar una incisión clásica son para extraer a un bebé que es muy prematuro, que tiene ciertas anomalías o que no está en posición de cabeza hacia abajo.
A veces, inicialmente se realiza una incisión transversal baja, pero por diversas razones, la incisión se extiende a la parte superior del útero. Esto da como resultado una incisión en T. Si la incisión se extiende a la parte superior del útero a lo largo del costado del útero, se denomina "incisión en J".
Es importante tener en cuenta que el tipo de incisión que se realiza en la piel del abdomen no es necesariamente el tipo que se realiza en el útero. Por ejemplo, es posible que tenga una incisión vertical en la piel, pero una incisión horizontal en el útero. Alternativamente, es posible que tenga una incisión horizontal en la piel, pero que se haya realizado una incisión vertical en el útero para extraer al bebé de manera segura.
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Una ruptura uterina es una complicación importante en la que el útero se desgarra o se abre durante el trabajo de parto. Generalmente, ocurre en el área de una incisión uterina previa. Puede causar sangrado grave y complicaciones potencialmente mortales tanto para la persona embarazada como para el bebé. El sangrado puede ser tan grave que se debe extirpar el útero para detenerlo (histerectomía). Para evitar esta complicación seria, los profesionales de atención médica recomiendan una cesárea programada en determinadas situaciones.
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Si ya ha tenido 1 parto por cesárea transversal baja, es candidata para una prueba de trabajo de parto después del parto por cesárea (TOLAC). El riesgo de ruptura uterina es bajo en esta situación (0.2 % a 1.5 %). Si le interesa una TOLAC, analice los riesgos y los beneficios con su profesional de atención médica. También debe saber si su hospital ofrece la TOLAC. Deben implementarse ciertas medidas de seguridad en su hospital para que se ofrezca la TOLAC, incluida la atención obstétrica y anestésica las 24 horas del día, los 7 días de la semana. No debe intentar una TOLAC en su casa o fuera de un hospital. La toma de decisiones compartida con su profesional de atención médica le permitirá tomar una decisión más informada para usted y su bebé.
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ruptura uterina durante el trabajo de parto. El riesgo de ruptura uterina es tan alto como del 4 % al 9 % en personas con una incisión uterina clásica previa. Se debe realizar una cesárea repetida, idealmente antes de que comience el trabajo de parto. Sin embargo, el riesgo de ruptura uterina debe sopesarse cuidadosamente frente a los riesgos de prematuridad para el bebé. Como regla general, se recomienda que las personas con una incisión uterina clásica, en T o en J previa se realicen una cesárea repetida entre las 36 y 37 semanas de embarazo. Su profesional de atención médica revisará sus circunstancias individuales para determinar si el momento debe ser anterior.
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Las personas que han tenido más de 2 partos por cesárea previos generalmente no son candidatas para una cesárea transversal porque tienen un mayor riesgo de varios tipos de complicaciones. En lugar de arriesgarse a una cirugía rápida debido a complicaciones durante el trabajo de parto, es mejor tener un procedimiento planificado para que el proveedor pueda tomarse su tiempo. También existe un mayor riesgo de sangrado durante el parto, que a veces requiere una transfusión de sangre. A menudo, es más seguro estar en el quirófano si se necesita una transfusión de sangre. Para minimizar los riesgos, generalmente se recomienda una cesárea repetida a las 39 semanas de embarazo. Se puede recomendar un parto por cesárea antes, entre las 37 y 38 semanas de embarazo, si hubo complicaciones en los partos por cesárea anteriores o si hay otros factores de riesgo.
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El riesgo de ruptura uterina en personas con más de 1 parto por cesárea previo es de entre el 0.9 % y el 3.7 %. Sin embargo, no está claro si este riesgo es mayor o menor que el riesgo que se corre después de 1 solo parto por cesárea previo. En estos casos, es importante hablar con su profesional de atención médica. Juntos, pueden tomar una decisión informada sobre la vía de parto más segura para usted y su bebé.
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Si le han hecho una cirugía para extirpar fibromas del útero (llamada "miomectomía"), es posible que se haya afectado la pared muscular del útero. Existen diferentes formas de extirpar fibromas, y cada método quirúrgico tiene sus propios riesgos durante el embarazo. Su profesional de atención médica necesitará conocer detalles sobre su cirugía, incluidos cuántos fibromas le extirparon, qué tan grandes eran y cómo se realizó la cirugía (mediante pequeñas incisiones o una incisión más grande en el útero). Cabe destacar que esto generalmente se aplica solo a las cirugías de fibromas a través del abdomen; no se aplica a las cirugías de fibromas realizadas a través de la vagina mediante una cirugía llamada "histeroscopia". En general, si su profesional de atención médica le ha recomendado que tenga un parto por cesárea debido a una miomectomía previa, generalmente se realiza entre las 37 y 38 semanas de embarazo. Si su miomectomía afectó en gran medida al músculo uterino, se podría recomendar el parto antes, entre las 36 y 37 semanas.
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Las mujeres embarazadas que hayan tenido una ruptura uterina previa no deben intentar un parto vaginal porque existe un alto riesgo de ruptura uterina, alrededor del 9 %. Es probable que su médico le recomiende una cesárea repetida entre las 36 y 37 semanas de embarazo.
Datos rápidos
Informe a su profesional de atención obstétrica sobre cualquier cirugía uterina previa y sobre los detalles de esas cirugías para que pueda determinar el momento y la vía de su parto.
Hay dos tipos básicos de incisiones uterinas que se utilizan durante los partos por cesárea: transversal y clásica.
El tipo de incisión en la piel puede no reflejar el tipo de incisión realizada en el útero, lo cual es información importante para planificar futuros partos.
Los partos por cesárea transversal son comunes. Un parto vaginal es posible si ha tenido 1 o 2 partos por cesárea transversal previos.
Un parto por cesárea clásica puede limitar las opciones de partos futuros a partos por cesárea únicamente.
Para aquellas personas con una incisión de cesárea clásica, en T o en J previa, se recomienda una cesárea repetida entre las 36 y 37 semanas de gestación debido al mayor riesgo de ruptura uterina.
Si se ha sometido a una cirugía uterina importante, como una miomectomía, es posible que se recomiende un parto por cesárea entre las 37 y 38 semanas de gestación, según los detalles de la cirugía.
Las mujeres embarazadas con más de dos partos por cesárea previos generalmente tienen una cesárea programada a las 39 semanas.
Glosario
Parto por cesárea: embarazo en el que el embrión se implanta en una cicatriz de cesárea previa en la pared interior del útero.
Incisión clásica: incisión vertical (arriba y abajo) realizada en la porción media del útero durante un parto por cesárea.
Fibromas: crecimientos no cancerosos que se forman en la pared muscular del útero.
Histerectomía: extirpación quirúrgica del útero.
Miomectomía: procedimiento quirúrgico para extirpar los fibromas uterinos.
Incisión transversal: incisión horizontal en la parte inferior del útero, que se utiliza habitualmente durante los partos por cesárea.
Prueba de trabajo de parto después de una cesárea (TOLAC): intento de tener un parto vaginal después de un parto por cesárea previo.
Ruptura uterina: problema serio en el que el útero se desgarra durante el embarazo o el parto, a menudo relacionado con incisiones quirúrgicas previas.
Útero: órgano en el que se desarrolla el feto durante el embarazo.
Última actualización: octubre de 2024